Momentos

Hay que saber encontrar los momentos, y ojalá lo hubiese entendido antes.
El momento adecuado es único e irrepetible, es la opción perfecta en la cuál deben transcurrir las cosas. Ni un día antes o media hora después: ahí mismo.
Es muy difícil encontrar la ocasión exacta para actuar. Es más, aunque hubiese una, es casi intangible de percibir. Dichosos los tiempistas de la decisión acertada, muchos de nosotros los envidiamos un poco (bastante).
Esto también va más allá de las intenciones, ¿estamos de acuerdo? Puedo tener toda la buena predisposición del mundo, pero por apurado o por boludo se me escapó de las manos, y no hay mucho por hacerle.
Con todo esto no quiero decir que no hay que ir y actuar, nada de eso. Vayan, jueguen y arriesguen, que de eso se trata un poco la vida. Probar y ganar, pero también tropezar y equivocarse, pero siempre tratar de salir a flote. En una de esas, con suerte o un poco de esmero, el momento indicado está a la vuelta de la esquina: no lo dejes escapar. No pierdas la oportunidad de actuar por vos mismo, de ir en busca de los que querés. Tal vez la oportunidad de tu vida está cerca, tal vez el el momento indicado es ahora.