Amores de mentira

Hace un tiempo que me vengo preguntando porque estoy solo. No estoy en soledad (sin ningún tipo de pareja) por unanimidad, no es eso. Tampoco es algo que me altere la cabeza y me llene de culpa. Estoy así, simplemente, por estarlo. No es la culpa de nadie, digamos. O si, la culpa es un poco mía, soy yo el que me aburrí de la etapa de conocer a la gente, esos momentos donde las charlas y relaciones empiezan a tomar color. Me aburrí de los primeros mensajes y las preguntas boludas. Me causan rechazo estas conversaciones falsas y vacías, donde ninguno demuestra nada real. Y como me aburrí, simplemente las esquivo. Por eso, lógicamente, sigo solo y sin conocer a nadie nuevo, en este mundo virtual en el que vivimos.
Además, llegue a la conclusión de que todos estos nuevos son iguales: ninguno me genera nada, y mucho menos sus encuentros (¡y amores!) casuales. No hacen que crezca nada nuevo adentro mío. A veces creo que están un poco vacíos. Otras, que yo estoy muy incompleto. En fin, en la primera de cambio cuando noto esto me voy por donde vine, no me gusta caretearla. ¿Por qué hacerlo?
Si, el problema lo tengo yo. Soy yo, que me aburrí de estos amores casuales. Soy yo, que esquivo los chamuyos baratos. Soy yo, que me harta el verso de colores que lastima al pedo. Soy yo, que digo lo que pienso aunque suene feo, porque las falsas ilusiones sé que duelen, y mucho.
Soy yo el que me canse, y así y todo, sigo con la esperanza intacta de que este alguien va a aparecer y cambiar todo eso, aunque lleve tiempo. Porque si, en una de esas tal vez aparece alguien interesante que llene un poco el vacío que llevo dentro.
Basta. Basta de la mina de carita linda o el flaco musculoso. Lo físico es solo eso, algo exterior. Lo importante es lo que cada uno lleva adentro, lo que lo distingue del resto. Vos y yo merecemos algo mucho mejor, lo sabemos.

Basta de estos amores inútiles. Esto va para mí, va para vos, y quien sabe para cuantos más. Basta de estos amores de mentira.

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